Por: Juan Carlos Gutiérrez, Director Ejecutivo del Instituto Chileno del Acero (ICHA).
La construcción en Chile no puede quedarse fuera de las tendencias mundiales. En países desarrollados la industrialización hace tiempo que llegó para quedarse. Su beneficios son claros y contundentes: mayor seguridad en las obras, menores tiempos de construcción, disminución de costos y menor contaminación.
Para conseguir este importante logro es necesario avanzar en la integración temprana de las distintas especialidades involucradas en la formulación de proyectos, incorporando variables que se abordarán más adelante en la etapa de la construcción.
Una herramienta fundamental para lograr el éxito de este proceso es el conocimiento de las normas técnicas aplicables a cada disciplina, la verificación de los certificados de conformidad y su correspondencia con los productos asociados mediante la rotulación, y su cumplimiento de la normativa vigente en Chile. Si distintos productos llegan a una obra sin cumplir con las especificaciones y calibraciones exactas, se generan problemas de ensamblaje y con ello demoras y costos adicionales, además de riesgos de judicialización de las obras.
Para las construcciones en acero, ICHA desarrolló el documento “Código de Prácticas Estándar para Construcciones en Acero” una publicación técnica que sirve como guía para mandantes, constructores, contratistas e inspectores involucrados en proyectos que requieren la utilización de los distintos productos de acero. Su cumplimiento permite identificar tempranamente los roles de cada participante de una construcción en el uso y aplicación de los distintos productos de acero y, junto con ello, evitar muchos de los problemas constructivos y contractuales señalados.
El “Código de Mejores Prácticas para Construcciones en Acero” está disponible para su adquisición en la página del ICHA, www.icha.cl